Economista de la Universidad Javeriana. Master en finanzas públicas de la Universidad de Exeter en Inglaterra, congresista y dirigente empresarial, Óscar Iván Zuluaga ocupó la cartera de hacienda de 2007 a 2010. Al referirse al comportamiento económico del país afirma que lo que falla es la microeconomía, porque no hemos sido capaces de hacer las reformas que Colombia necesita.

“La micro es la que determina la competitividad y la productividad del país y por eso nosotros no podemos crecer más del 4,5 %”.

Según el exministro, Colombia ha logrado construir estabilidad porque ha tenido una buena macroeconomía y en ese sentido logró poner en la misma dirección los elementos básicos de una buena gestión que son la Política Monetaria, la Política Fiscal y la Política Financiera.

Advierte que el país tiene que volcar todos los recursos hacia la educación. “Pero hay que hacerlo ya, cómo es posible que un país como Colombia no tenga universalizada la jornada escolar, usted encuentra hoy que en las universidades está descendiendo la matrícula no por razones económicas, ni por ser pilo paga sino porque no hay trabajo. La tasa de desempleo más grande está en el grupo de jóvenes y mujeres. Ahí hemos perdido un terreno importante”.

Usted ha dicho que Colombia ha consolidado la macro pero el desafío es la micro. ¿Cómo se explica este dilema?

Si uno mira a Colombia a partir de la década del 2000 puede decir que Colombia consolidó un principio esencial para que un país pueda pensar en crecer y en mejorar sus indicadores sociales y es que construyó estabilidad macroeconómica. Cuando un país construye estabilidad macroeconómica quiere decir que logra sintonizar o poner en la misma dirección los elementos de política básica que son la política monetaria, la política fiscal y la política financiera. Cuando esos tres pilares están bien orientados, un país consolida una estabilidad macroeconómica y eso se refleja en indicadores de baja inflación, de buen nivel de reservas.

Pero además, el país consolidó algo que es fruto de la constitución del 91 y es una institucionalidad muy fuerte que tiene en la independencia del Banco de la República y en la Superintendencia Financiera los dos elementos esenciales para asegurar esa estabilidad macroeconómica. Ese es un legado muy valioso.

Me parece que la economía estuvo expuesta a dos choques que probaron esa estabilidad. A mí me tocó el cierre del comercio con Venezuela, donde el país perdió de un día para otro 5.000 millones de dólares de inversión y adicionalmente la crisis de la economía global. Colombia resistió eso con lujo de detalles. Tuvo crecimiento positivo en el 2009 y a los seis meses de haber terminado el gobierno le entregaron el grado de inversión a Colombia, que era un sueño que no se había consolidado porque era una economía destruida. Tuvo que transcurrir casi una década para poder recuperar el grado de inversión, que es el reconocimiento a un país que tiene estabilidad macro y está haciendo una política adecuada. Eso vino acompañado de algo importante y es que Colombia aceleró la institucionalidad fiscal y ese ha sido un trabajo de muchos ministros y de muchos gobiernos.

Por ejemplo, Juan Camilo Restrepo hizo la ley de ajuste fiscal que limitó el crecimiento del gasto de los entes territoriales y la deuda. Eso fue muy importante porque le introdujo disciplina fiscal a una bomba en el pasado que eran las finanzas territoriales. Luego Junguito y Carrasquilla establecieron dos cosas muy importantes: el marco fiscal de mediano plazo, lo que significa que es un país que cada año le está diciendo a los mercados para donde vamos en los próximos diez años. Eso crea una disciplina fiscal enorme. Algo que hizo Carrasquilla, que me pareció muy valiente, fue la suspensión de las adiciones presupuestales. Se dio un gran avance en materia de disciplina.

Sostenibilidad y regla fiscal

Cuando yo entregué el Ministerio de Hacienda dejamos dos cosas que hacen parte de la institucionalidad y que fueron desarrolladas por el ministro Juan Carlos Echeverry: el principio de la sostenibilidad fiscal en el ordenamiento constitucional colombiano y todo el engranaje de la regla fiscal. Con todos estos antecedentes uno podría afirmar que Colombia ha logrado construir estabilidad porque ha tenido una buena macro. Usted para progresar necesita tener una buena macro que se refleja en estabilidad y eso lo ha demostrado Colombia.

Lo que falla en nuestro país es la micro, porque no hemos sido capaces de hacer las reformas que el país necesita. La micro es la que determina la competitividad y la productividad del país y por eso nosotros no podemos crecer más del 4.5%. La diferencia con Perú y Chile es que ellos hicieron una macro y después una micro que volvió muy competitivas las economías y por eso el crecimiento potencial del Perú era 7% y Chile 6.5%. Esos índices significan que la economía puede crecer al 6 y al 7 con baja inflación.

En el caso de Colombia, si usted se pone a crecer al 7% se le puede disparar la inflación porque no está empujada por razones de competitividad y de cambios estructurales. Ahí es donde el país se ha enredado, en la agenda micro. Y aparecen todos los problemas: que cambiamos mucho las reglas de juego, el tema de las instituciones, el tema de la corrupción, la falta de confianza, el tema de la eficiencia en la educación, el tema de la infraestructura, la baja innovación, la poca inversión en ciencia y tecnología, etc.

En el caso de la infraestructura, miremos el ejemplo de Transmilenio. Cuando arranca Transmilenio en Bogotá a nosotros nos tocó entregar vigencias futuras y decíamos que en los próximos 10 años tendrían que haberse construido 500 kilómetros y si lo lográbamos le dabamos un revolcón a la ciudad en materia de movilidad. Llevamos 160 kilómetros 25 años después. Entonces Transmilenio en la Caracas colapsó.

Colombia tiene capacidad de endeudamiento, tiene acceso a los mercados, entonces la gente se pregunta ¿por qué no hemos sido capaces de hacer una economía más competitiva y más productiva?

En 4G, en los dos primeros años de este gobierno, se irán desentrabando los problemas cuando ya deberían ser obras en ejecución. Eso le cuesta mucho a la economía, porque Colombia es un país costoso en materia logística, en materia de infraestructura, en mercado de internet, y eso es lo que delimita hoy al país. Por eso hoy nuestro crecimiento potencial es inferior al que finalizamos en el 2010, cuando la economía tenía un crecimiento potencial del 4.5% y hoy es del 3.0% o 3.5%. Si usted pone a crecer hoy la economía al 4% usted no transforma los problemas sociales del país, usted no va a construir un país de avanzada, no le sirve.

Hace 50 años nosotros éramos superiores a Corea en per-cápita. ¿Qué hicieron los “tigres asiáticos”? Se dedicaron a producir para mejorar la productividad. Y ¿en qué se concentraron? En educación, en infraestructura y en ciencia y tecnología. Cuando el motor del crecimiento económico son esos factores la economía se dispara. Cuando usted depende del precio del petróleo está mal. Si cae el precio del petróleo usted no crece. Si aumenta el precio del petróleo pues aumenta el ahorro y aumenta la riqueza. Esa fue la tragedia de América Latina y por eso nosotros en 50 años no crecimos.

¿Cómo se puede mejorar la productividad y la competitividad?

La tarea fuerte está en cómo lograr que la economía pueda mejorar sus condiciones de productividad y de competitividad y creo que las tres variables microeconómicas prioritarias son: la educación, la infraestructura y la innovación. Aquí es donde están las grandes brechas para que el país pueda crecer mucho más. Si eso no se hace vamos a seguir sobreviviendo pero el país no va a dar ningún salto.

El problema hoy se acelera más porque estamos perdiendo el bono demográfico, que es la mayor contradicción. Europa es un continente donde el promedio de edad puede estar llegandoa los 48-50 años, en Asia, salvo en Indonesia, que tienen un nivel de población muy grande, en países como Japón y Corea el envejecimiento es muy alto y en Colombia y América Latina el promedio de edad es 32 años. Estamos perdiendo la generación que deberíamos haber educado, que debería estar formalizada, que debería estar financiando el sistema de seguridad social y ese bono lo estamos perdiendo. Y teniendo en cuenta que en Colombia se invirtió la pirámide y la población se está envejeciendo, ¿cómo vamos a hacer, proyectados a 30 o 40 años, para financiar, por ejemplo, la seguridad social?

Hay que volcar todos los recursos hacia la educación. Pero hay que hacerlo ya. Cómo es posible que un país como Colombia no tenga universalizada la jornada escolar. Usted encuentra que hoy en las universidades está descendiendo la matrícula no por razones económicas, ni por ser “pilo paga” sino porque no hay trabajo. La tasa de desempleo más grande está en el grupo de jóvenes y en mujeres. Ahí es donde hemos perdido un terreno importante.

Todos los indicadores muestran que hemos avanzado, pero no con el ritmo que necesitamos para crecer. Este país tiene población, tiene localización y recursos, Debería ser un país de avanzada. Colombia debería ser un país de 20.000 dólares de ingreso per-cápita. Este no es un tema que de espera. Cada año que pase y se pierda es lamentable, cada año que crezcamos menos es doloroso. Vamos bien, pero en este trimestre crecimos 2.8% y deberíamos estar en 3.2%. Eso vale mucha plata y quiere decir que no está consolidada plenamente la recuperación, que todavía esto no arranca definitivamente. A mí me parece que el país tiene que definir una priorización para que pueda crear una plataforma de crecimiento.

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